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How to Build a Camp Fire

Cómo encender una hoguera

Cómo encender una hoguera en seis sencillos pasos

Tanto si estás disfrutando de un par de días de acampada en la naturaleza con alguien especial, como si te pilla una larga caminata por culpa de las inclemencias del tiempo, una hoguera es esencial para proporcionar calor, luz y una forma de calentar la comida y la bebida. Todo lo que necesitas es combustible y una fuente de ignición.

Paso 1 - Encontrar o construir un anillo de fuego

Si estás en una zona de acampada designada, o en un parque público o nacional, comprueba de antemano que las hogueras están permitidas. Evalúa el lugar antes de encender el fuego. Si el lugar está lleno de maleza o tiene ramas que cuelgan a poca altura, reduce el tamaño del fuego o evítalo por completo. En condiciones secas, las brasas que vuelan pueden provocar fácilmente un incendio forestal.

Retira todo el material inflamable de la hoguera. Lo ideal es que la base de la hoguera sea de arena, grava o suelo mineral (suele encontrarse en los lechos de los arroyos o en las barras de grava). El calor intenso puede esterilizar el suelo sano, así que elige el lugar a conciencia. Rodéalo de rocas si puedes encontrarlas o cava una pequeña zanja alrededor de la zona, amontonando la tierra en el centro para crear un montículo bajo. Así evitarás que el fuego se propague, algo esencial si vas a dormir junto a él.

Paso 2 - Recoge leña

Para encender un fuego con éxito, necesitarás tres tipos de combustible: yesca, leña y leña.

- Layesca incluye pequeñas ramitas, hojas o hierbas secas, agujas, corteza o arbustos. Lo más probable es que la encuentres debajo de los árboles, donde no cae la lluvia, pero también puedes crearla a partir de palos más grandes raspando capas finas con un cuchillo o un punzón para encender fuego. Es algo que puedes recoger y guardar en una lata o bolsa con cierre mientras caminas, para tenerlo disponible cuando lo necesites.

- La leña consiste en pequeños palos, normalmente de menos de una pulgada de diámetro. De nuevo, cuanto más secos, mejor, y se encuentran en el suelo alrededor de los árboles. Puedes arrancarlos de árboles y arbustos muertos pero, si no se rompen fácilmente, es que aún están vivos y no arderán.

- Laleña es cualquier trozo grande de madera, y es lo que mantendrá el fuego encendido hasta bien entrada la noche. Es probable que este tipo de madera aún esté húmeda pero, siempre que empieces con poca y vayas añadiendo trozos más grandes a medida que el fuego vaya creciendo, se secarán una vez que estén en el fuego. No recojas ni quemes ramas más gruesas que la muñeca de un adulto. Esto se debe a que rara vez se permite que los trozos gruesos de madera se quemen por completo y suelen quedar como restos ennegrecidos y antiestéticos.

Es importante que reúnas leña y madera de distintos tamaños y tipos para que puedas encender el fuego poco a poco. Si añades demasiada cantidad demasiado pronto, se apagará. Cuando recojas materiales, recuerda que los pájaros y los insectos también pueden aprovechar lo que recojas, así que coge sólo lo que necesites.

Paso 3 - Encender la hoguera

Hay tres tipos diferentes de hogueras: tipi, cabaña de madera y pirámide invertida.

Tipi

Empieza con un pequeño cono de leña alrededor de unos cuantos puñados de yesca apilados sin apretar en el centro de la hoguera. Una vez que el fuego esté fuerte y la temperatura aumente, puedes añadir troncos más grandes de uno en uno según sea necesario.

Cabaña de troncos

Coloca dos trozos grandes de leña paralelos entre sí y con algo de espacio entre ellos para formar la base de la estructura. A continuación, gira 90 grados y coloca dos trozos ligeramente más pequeños encima y perpendiculares para formar un cuadrado. Coloca mucha yesca dentro del cuadrado. Continúa añadiendo unas cuantas capas más de leña alrededor del perímetro, haciéndolas un poco más pequeñas con cada capa. Termina con una capa de leña y yesca en la parte superior. Recuerda dejar espacio entre los troncos para que el fuego reciba suficiente oxígeno.

Pirámide invertida

Empieza con tres o cuatro de los troncos más grandes uno al lado del otro en la capa inferior. Gira 90 grados y añade una segunda capa de troncos ligeramente más pequeños. Continúa alternando algunas capas más de esta manera, haciéndolas más pequeñas a medida que avanzas. Coloque la leña y la yesca encima.

Paso 4 - Enciende la hoguera

Encienda la yesca con una cerilla, un mechero o con una varilla y un pedernal como el LifeSaver Fire Starter. Las cerillas deben mantenerse secas y el mechero puede ser un problema si hace viento. Si decides utilizar un acelerante, añade lo que necesites y guarda el resto lejos de la hoguera. (Puede que los puristas del Bushcraft no vean con buenos ojos estos métodos, pero si el fuego de campamento es para divertirse, ¿por qué hacerlo más difícil de lo necesario y, si es para sobrevivir, haz lo que te funcione?)

Después de encender la yesca, sopla ligeramente en la base del fuego para aportar oxígeno, lo que ayudará a aumentar la intensidad de la llama y encender aún más la madera.

A medida que el fuego arda, mueve las brasas hacia el centro para quemarlas por completo. Lo ideal es reducirlas a cenizas blancas.

Paso 5 - Apagar la hoguera

Consulte siempre las recomendaciones de los gestores locales de los terrenos y siga sus pasos si se los dan. En general, sin embargo, debe apagar el fuego vertiendo agua sobre él (tenga cuidado de no situarse donde el vapor pueda escaldarle), removiendo las cenizas y aplicando más agua. Repite la operación tantas veces como sea necesario. Las cenizas deben estar frías al tacto antes de abandonar el lugar. Asegúrese por completo de que el fuego y sus brasas están apagados y fríos antes de marcharse.

Tenga en cuenta que la práctica de utilizar tierra o arena para apagar una hoguera es problemática porque puede aislar las brasas, que pueden quedar al descubierto más tarde, provocando un incendio forestal.

No deje nunca una hoguera desatendida.

Paso 6 - Limpiar la hoguera

Queme la basura sólo si el fuego puede consumirla por completo y convertirla en cenizas. No intente quemar plástico, latas o papel de aluminio. Si quema algo que no se haya consumido por completo, recoja los restos cuando se apague el fuego y empaquételos o deposítelos en un cubo de basura.

Extrae los trozos de carbón que queden en el interior del anillo, llévalos lejos del lugar, aplasta los trozos y esparce los restos y el polvo por una zona amplia. Desmonta cualquier estructura que hayas construido. Intenta dejar el menor rastro posible del fuego.

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